InicioBlogNo me pasa nada. Especial: todas usamos máscaras

No me pasa nada. Especial: todas usamos máscaras

Viernes 03 Nov 2023
/ Blog
No me pasa nada. Especial: todas usamos máscaras
284 vistas
Click para ampliar

"Esa vulnerabilidad de las cosas valiosas es hermosa, 

porque la vulnerabiidad es una marca de existencia"

Simone Weil

 

¡Te han puesto una mordaza emocional!

Cuando eras pequeña y de repente tropezabas y caías, o perdías tu juguete favorito... Tenías la divina capacidad de expresar toda tu frustración, dolor o descontento, llorando con toda sinceridad, o quizá dando alaridos que dejaban claro a todos cuánto dolor estabas experimentando.

También pudo ocurrir que dejabas aflorar con total sinceridad tus talentos, tus miedos, tus hazañas, pero pudo ocurrir que no fuiste aprobada por las personas importantes que parecían nunca estar satisfechas con quién tú eras.

En ese instante aparecía la figura adulta para decirte "no llores, eso no es nada" y de tanto repetirlo parece ser que lo has creído.

Está máscara aparece como la muestra innegable de la desconexión con tu cuerpo y sus necesidades o el olvido de tus sentimientos y sus mensajes.

Es mejor decir "no pasa nada" y acallar la voz herida que te pide auxilio, un descanso o un abrazo consolador... que enfrentarte a tus dolores, a lo que te pide atención, a eso que pide ser resuelto.

Es muy común ver personas con una mueca de felicidad fingida que no deja paso a la necesaria tristeza, al autoconocimiento, y al descanso.

¿Cómo se expresa esta máscara en tu vida adulta?

Esta máscara aparece en tu vida porque en algún momento del pasado viviste una relación con tus padres o figuras de poder que fueron exigentes, autoritarios y que eran difíciles o casi imposibles de complacer.

No te confundas, no tiene que haber sido un evento traumático (o puede que si), solo que tu cerebro en ocasiones interpreta de maneras exageradas eventos diversos para tratar de interpretar el mundo para adivinar cómo sobrevivir, pertenecer y ser amada.

Esta máscara se expresa en tu vida adulta, como una mujer que niega sus emociones para protegerse de la mirada injusta que tuvo en el pasado, para evitar ser herida se muestra inflexible, es dogmática para evitar equivocarse y así no seguir "defraudando" a quienes son importantes en su vida, en resumen se sienten inútiles, ineficientes y por tanto buscan ser fuertes a la vista de otros, quieren hacer todo perfecto en busca de la aprobación de figuras importantes y por ello no saben relajarse y mucho menos pedir o recibir ayuda.

¿Qué acciones concretas puedo tomar para dejar de negar mi vulnerabilidad y depender de la aprobación de los demás?

1. Lo más importante que te puedo sugerir es: No te lo niegues, es tu derecho, el dolor es un llamado que te indica que algo no está bien en tu vida y por lo general no has atendido, si escuchas esa voz que te habla a través de malestar físico o emocional, podrás transformar tu vida, del dolor al amor.

2. Acepta que nunca vas a llenar el vacío de aprobación que ha dejado tu pasado, no lo vas a encontrar en las personas de tu presente (ni siquiera si son las mismas que antes te desaprobaron)

3. Lo más liberador que puedes hacer es lanzarte, dejarte ser vulnerable y así probarte que no pasa nada negativo, antes lograrás ser más auténtica y aprobarte a ti misma

Al fin de cuentas, a todos nos duele algo, ¿a ti qué te duele? Este es el momento para pensarlo y hacerte cargo, permitiéndote sentirlo y transformarlo en compañía de un terapeuta desde una mirada atenta y compasiva.

sí resuenas conmigo, puedo acompañarte en tu proceso, hazte cargo de tus dolores y aprende como experimentar mayor claridad, felicidad y poder en tu vida

Recuerda que, aunque te resistas, estás destinada a florecer.

Te abrazo.
Caro Rendón

Compartir:

Comentar


Comentarios

0 registros encontrados